Las redes de trabajo se basan en la voluntad y compromiso de participación de los miembros. Durante el 9 y 10 de mayo, Fe y Alegría El Salvador, se convirtió en el anfitrión de la reunión de directores de Fe y Alegría Centroamérica. La mayor parte de la agenda se desarrolló en el Centro Loyola en Antiguo Cuscatlán con el objetivo de revisar, analizar y tomar decisiones estratégicas sobre los procesos de trabajo y la articulación de la Red Fe y Alegría en la región.
Durante el evento, se abordaron diversos temas importantes para la misión de Fe y Alegría. Uno de los principales puntos de discusión fue la formación para el trabajo digno, considerando su importancia para el desarrollo personal y profesional de los jóvenes centroamericanos. También se exploraron las relaciones con los Estados, una oferta educativa adecuada y profundamente enraizada en la realidad centroamericana, la atención eficaz a las juventudes, entre otros.
El encuentro también brindó espacios para el intercambio y la reflexión a través de dos enriquecedoras conversaciones en las que participaron Celia Ajú, investigadora de la Universidad Rafael Landívar, Carlos Barreda, diputado del Parlamento Centroamericano/PARLACEN, Argentina Santacruz, Francisco Martínez y María Elena Solórzano, representantes de la OIM El Salvador.
Este evento confirma el compromiso de Fe y Alegría Centroamérica con la mejora continua y el trabajo colaborativo efectivo, reafirmando su rol como una red educativa transformadora en la región, teniendo en mente el primer mandamiento del DECÁLOGO DE LA REDES EN FE Y ALEGRÍA (Bolivia 2016): “Nos sentimos llamados desde nuestra identidad a ser red y trabajar en red con otros”.
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